La salida a la Crisis mundial. Educación, Clima, Pueblos originarios y Política.

En Chile, uno de los principales constructores del sistema educacional, José Joaquín Brunner tilda el espíritu del movimiento estudiantil de estar teñido por «Infantilismo Revolucionario». La palabra intransigencia se toma las declaraciones de ambos bandos. La fuerza del movimiento es inquebrantable. La Autoridad, sin respaldo en las encuestas, sigue el consejo de Brunner: Llevar todo al «cauce institucional». En la retina del observador nacional está claro que el movimiento Pingüino, de idéntica magnitud, fue ahogado en dicho «cauce».

Entre los actores crecen muros y los excesos están a la orden del día.

Por una parte, los actores que encarnan la institucionalidad señalan que la Salida de nuestra sociedad pasa por respetar el Orden que nos hemos dado. La Democracia es nuestro sistema y toda otra posibilidad de ordenamiento está fuera de la discusión «institucional».

Por otra parte, los estudiantes mantienen una movilización y un estado de crisis porque este Orden que se mantiene con el monopolio de la fuerza que ejerce el Estado sofoca todas expresiones de cambio que surgen desde los pueblos originarios, desde los defensores de la Madre Tierra y desde los que sueñan un mundo mejor ahora.

La salida

La mayor ampliación de conciencia que se registra corresponde a la era en que la Humanidad aprendió a controlar el fuego. La Salida a la actual crisis planetaria corresponde a una nueva era de ampliación de conciencia y esta vez, las posibilidades infinitas que se nos abren vienen de la comprensión de la Naturaleza del Agua.

El Doctor Masaru Emoto ha probado que el agua registra la vibración. El mar y los ríos contienen la emoción de la Tierra. En la cosmovisión China, como en la Cosmovisión Hopi se nos invita a aprender del agua y aprender a fluir. Esto tiene que ver con aprender a romper las amarras que nos tienen anclados y permitirnos ir con el río tumultuoso que lleva a esta Sociedad hacia su iluminación. Es natural que vayamos hacia el Océano en que nos reconocemos a Todos en el Uno. Soltar amarras importa soltar la importancia personal.

El agua lleva aparejada la idea de peligro. La generación anterior que promovió cambios, lo hizo basada básicamente en la espeluznante posibilidad de que algún genocida «apretara el botón» rojo nuclear. Hoy, el peligro es mil veces superior y la SALIDA vuelven a señalar consistente y coincidentemente los sabios y sabias de los pueblos originarios es la imagen del agua que fluye, que limpia y que cura.

La gratitud por poder vivir este momento.

En definitiva, vivir este momento de evolución acelerada y tener conciencia de ello no puede ser sino un motivo de inmensa alegría. Sabemos que hay un proceso en curso y que ese proceso nos tiene como principales protagonistas. De cada uno de nosotros y de la voluntad con la cual nos dediquemos a erradicar nuestros vicios y a purificarnos depende el «GRAN CAMBIO». Este Cambio pasa por reconocer que heredamos una Cultura que exacerba la competencia y el ego. La Salida pasa por cooperar y ello importa dejar la importancia personal de lado.

La meditación, el yoga, la alimentación saludable, la educación para la paz, la permacultura: todo el conocimiento está a un click. El ejercicio de mantener una férrea voluntad es fácil en la medida que siempre recordemos la maravillosa oportunidad que es haber nacido humano en un planeta donde las armonías celestiales se combinan  de tal manera que fabulosamente se produce la vida. La GRACIA de respirar es sagrada y el camino de andar solamente nos invita a cooperar y a co-construir esta sociedad de servicio y cooperativa con la cual todo saldrá adelante. El diálogo social se encausará por la fuerza de los tiempos hacia la sabiduría elemental.

Somos Anonymous, somos legiones de guerreros de la luz: Nuestro objetivo es una sociedad luminosa, amable, feliz y estamos acá para servir a todos los seres de todos los reinos.